A María de Medici, la reina de Francia, su vida en el gran palacio del Louvre le resultaba asfixiante. Ordenó entonces que se levantará en la orilla izquierda del Sena un palacio rodeado de una gran zona ajardinada. Después de cuatrocientos años los jardines de Luxemburgo han sido testigos de grandes acontecimientos de la Historia parisina. Fue cárcel durante la revolución francesa, cuartel de la Luftwaffe en los años de la ocupación y en la actualidad la sede del senado francés. Sin embargo, su intrahistoria y valor emocional posiblemente sea más importante. Este lugar ha servido de fuente inspiradora para artistas y escritores de todas las épocas. Las obras de autores como Balzac, Baudelaire o Verlaine, muestran pasajes en los que se recrean sus inolvidables paseos por estos jardines.Una multitud de sillas metálicas pueblan ahora todo el parque. Nos invitan a sentarnos para conversar, mirando al sol que se filtra en la alameda.
Autor de foto y texto: Alfredo Medina ©