La calle más bella del mundo

gran canale

Gran Canal y el puente de Rialto (Venecia) ITALIA

Es probable que al viajero que navegue por el Gran Canal le invada el desconcierto. A lo largo de sus 3.800 metros de longitud se acumulan un sinfín de obras maestras que desbordan la razón. Sobre las riberas del canalazzo se asoman más de 100 palacios de estilos gótico, renacentista y barroco, que rebosan lujo y color. Casi todos ellos conservan el nombre de la familia propietaria, lo que nos sirve para hacer un recorrido por la vieja y poderosa aristocracia veneciana. En el lugar donde el canal se estrecha, se construyó en 1588 en el el puente de Rialto. Esta estructura que fue durante muchos años la única vía de unión entre las dos orillas, exhibe bajo sus arcadas una serie de pintorescas tiendas.

El Gran Canal es la vía de comunicación más antigua y transitada de Venecia. Por su cauce navegaban hace siglos robustas galeras y grandes barcos mercantes. Ahora lo atraviesan regularmente ruidosos vaporettos y silenciosas góndolas, que transportan a esos invasores pacíficos que son los turistas . Esta Venecia que sobrevive con elegante dignidad a las afrentas del tiempo, conserva hoy toda su singularidad. Por todo ello sigue teniendo sentido aquella afirmación que hizo el viajero y embajador de Francia hace 500 años, cuando dijo que el Gran Canal era «la calle más bella del mundo».

Autor de foto y texto: Alfredo Medina ©

El Pedró de Pals (Girona)

 

Torre de las Horas (Pals) Girona. ESPAÑA

Torre de las Horas (Pals) Girona. ESPAÑA

El Ampurdán gerundense atesora un amplia relación de evocadores pueblos medievales. Entre todos ellos, impresiona la singularidad de Pals; esa encantadora villa construida sobre un pantano y ejemplo destacado de arquitectura románica y gótica. De su pasado medieval nos habla su espléndido casco antiguo,conocido como el Pedró. Durante un recorrido por su calles, el viajero quedará deslumbrado por sus calles empedradas, atravesadas por grandes arcos de medio punto. En la fisonomía de esta localidad resalta su muralla del siglo XII, sus altivos campanarios y sobremanera la torre de las Horas. El escritor Josep Plà, un enamorado de este pueblo, reflejó la belleza de Pals  de manera sincera…

He pasado tantas horas en el Pedró de Pals, sentado en el rellano del crucero, que debo confesar que me gusta siempre :tanto si la atmósfera es limpia, como si la humedad de los vientos del sur la enturbia un poco. 

 Josep Plà. El meu país. OC VII, 207-208

 Autor de foto y texto: Alfredo Medina ©

Kutná Hora. República Checa.

Kutna Hora

Palackého nám. Kutná Hora . (BOHEMIA) REP.CHECA

El antiguo reino de Bohemia basó parte de su esplendor en la explotación de las minas de plata de la comarca de Kutna Horá. Gracias al boom de la actividad minera, está ciudad experimentó un gran crecimiento en el siglo XIV , llegando a rivalizar en poder económico con Praga. Esta urbe, que recibió de Wenceslao II el título de Real Ciudad Minera, atesora auténticas joyas arquitectónicas. Destaca sobre todo la Iglesia gótica de Santa Bárbara, sus viviendas barrocas y el cautivador barrio de Sedlec. El valor cultural y artístico de esta villa quedó reconocido en 1995, cuando Kutná Hora fue declarada Patrimonio de la Humanidad.

 Autor de foto y texto: Alfredo Medina ©

Praga. Plaza de la Ciudad Vieja.

Plaza de la Ciudad Nueva (Praga) REP. CHECA

Plaza de la Ciudad Vieja (Praga) REP. CHECA

Después de atravesar ese laberinto de calles que es el barrio medieval de Praga, el viajero se queda sobresaltado ante un espacio colorista y diáfano. La antigua plaza del mercado, conocida como Staromestské námestí  está poblada de bellos edificios de tonos pastel que  le confieren una personalidad muy definida. Construcciones de estilos heterogéneos y  volúmenes diversos conforman uno de los espacios más pintorescos de la capital checa.  El lado Norte está presidido por la iglesia gótica de Nuestra Sra. de Tyn. En las horas nocturnas  sus  agujas góticas deslumbran sobre la plaza , para mucho la «más bella de Europa».

Autor de foto y texto: Alfredo Medina ©