Verano de 1970. Un joven Joan Manuel Serrat se hospeda en el pequeño hotel Can Batlle de Calella de Palafrugell. Ha lanzado ya tres LPs y prepara su próximo disco. Los paseos por pueblo, el contacto con sus gentes y las vistas al mar inspirarán la que es considerada la mejor canción española del siglo XX: Mediterráneo. Esta villa de la Costa Brava que ha sobrevivido al boom urbanístico, conserva todavía todo su encanto marinero. Cuando hoy caminamos por sus callejuelas, o pisamos su playa podemos experimentar las mismas sensaciones que inspiraron a Serrat. Calella es sinónimo de Mediterráneo.
Si un día para mi mal /viene a buscarme la Parca/ empujad al mar mi barca/ con un levante otoñal/ y dejad que el temporal/ desguace sus alas blancas. (Joan Manuel Serrat /Mediterráneo)
Autor de foto y texto: Alfredo Medina ©